La joven subió un video a la red social y obtuvo más de 1,7 millones de visualizaciones en muy poco tiempo. “Estaba arreglando la hamburguesa porque las capas estaban por todas partes cuando vi el juguete por primera vez. Estaba pensando que necesitaba encontrar mi teléfono para filmar y tomar fotos como prueba antes de tocarlo”, contó.
Al ver el objeto, se “enojó”, porque es “asqueroso” y no entendía cómo estaba eso en su hamburguesa. Sin embargo, no hizo ningún reclamo ante el local en donde la compró.
“No volví al local porque estaba un poco preocupada de que no me creyeran y tengo mucha ansiedad cuando tengo que hablar con la gente cara a cara, así que solo le di la hamburguesa a mi perro, menos el juguete, y publiqué el video”, explicó.
“Grabé el video, tomé algunas fotos, luego se lo mostré a mi madre y a mis dos hermanos, se rieron y pensaron que estaba bromeando y que lo había hecho. Luego se rieron del video, porque la cara a través del queso era bastante graciosa”, concluyó.