Ese fue el primer gran paso de “Pelusa” en el conjunto napolitano después de haber arribado a la institución en 1984 a cambio de 14 millones de liras, convirtiéndose en el fichaje más rutilante de aquel país hasta entonces.
El recibimiento de los hinchas fue a la talla de la magnitud del futbolista que disfrutarían por unos cuantos años: colmaron el estadio San Paolo, hoy con el nombre de Maradona a modo de homenaje, con 80 mil espectadores.
Otra de los campeonatos más significativos para el club, en el que Maradona también fue su jugador más importante, fue la Copa UEFA de 1989, también la primera en la historia para Napoli. Venció en la ida de la final a Stuttgart por 2 a 1, con gol y asistencia de Diego. En la vuelta, igualaron 3 a 3.
De todos modos, el romance de Maradona y el equipo italiano, que también tuvo otra liga local y una Supercopa italiana, trae otros recuerdos imborrables en la actualidad como la entrada en calor del campeón del Mundo ante Bayern Múnich al ritmo de “Life is life”, mientras hacía jueguitos.
El argentino demostró toda su calidad con acciones imposibles en sus goles. Con la camiseta celeste, el 3 de noviembre de 1985, Napoli se enfrentó al invicto Juventus en San Paolo y el “Diez” hizo uno de los goles de tiro libre más impresionantes que se hayan visto.
El legado de Maradona en el club italiano fue histórico y sus hinchas lo recuerdan con mucho cariño. Luego de su fallecimiento, el estadio de la institución pasó a tener su nombre a modo de homenaje, desde diciembre de 2020.