«Nos hicimos adictos a la grieta. Somos adictos a la grieta. Hoy hasta hombres y mujeres estamos disociados. Hay una tendencia a separar. Empezó todo con Menotti y Bilardo, unitarios y federales, peronistas y radicales, y hoy estamos totalmente enfermos, porque es mucho más fácil pelearse que mirar para adentro y hacer un mea culpa», aseguró Bossi, en diálogo con Jorge Rial.
«Este país llega a lo que llega por una mala derecha, una mala izquierda, un mal centro, malos unitarios, malos federales… No es culpa ni de uno ni de otro. Lo peligroso es que los argentinos seguimos peleándonos», agregó.
El humorista lamentó que la televisión dedique tanto tiempo a «algo tan nefasto como es la política», aunque luego reconoció que «la política es clave para transformar el mundo».
También se refirió a la relación entre el arte y la política y aseguró que «el desafío más grande de mi carrera fue alejarme de la política para no dividir el público».
«Un artista no debe ser lacayo del poder, porque, si es lacayo del poder, será fácilmente olvidado», concluyó Bossi.