La NASA ya tiene la vista puesta en la luna y acaba de cerrar un contrato con una empresa que hará los servicios de entrega de extremo a extremo, incluida la integración de la carga útil, la entrega desde la Tierra hasta la superficie de la Luna y las operaciones de carga útil. La firma Draper de Cambridge, Massachusetts, recibirá u$s73 millones por el contrato.