Un elefante blanco, considerado en los países de mayoría budista como una señal de buenos augurios, nació semanas atrás en el oeste de Myanmar (ex Birmania). Solo hay 6 ejemplares en cautiverio.
Un elefante blanco, considerado en los países de mayoría budista como una señal de buenos augurios, nació semanas atrás en el oeste de Myanmar (ex Birmania). Solo hay 6 ejemplares en cautiverio.