La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), a través de la Dirección General Impositiva (DGI) y conjuntamente con personal de la policía bonaerense, secuestró 3.000 toneladas de granos de maíz por falta de respaldo documental. Durante agosto se detectaron defectos en la registración por casi 10 mil toneladas.