A pocos días del 5 de junio, fecha a partir de la cual el gobierno norteamericano podría empezar a quedarse sin dinero para honrar sus deudas, el presidente Joe Biden y legisladores de la oposición republicana alcanzaron un principio de acuerdo para elevar el techo de la deuda de Estados Unidos, en un crucial primer paso para evitar un «default catastrófico» de la primera economía del mundo.