La cuarentena en Argentina ya lleva más de un mes y, con el transcurrir de los días, cada minuto, cada segundo pesa más y más para muchas personas. Sumado al encierro y al miedo a un virus desconocido, también crecen los temores y las angustias al toparnos con nosotros mismos y con nuestros problemas cotidianos, de los cuales tampoco podemos escapar al estar confinados cada uno en nuestras casas.
Estamos encerrados con nuestros pensamientos y también lo estamos físicamente, como en una especie de “Casa Tomada” de Julio Cortázar posmoderna. ¿Cómo lidiar todo el tiempo con nuestros pensamientos? ¿Cómo enfrentar los problemas que podemos tener con las personas con las que convivimos en esta prolongada cuarentena? Todo eso puede encerrarnos cada vez más en un círculo de angustias y temores sin puerta de salida. En este escenario, las consultas psicológicas online emergen como un bote salvavidas, y pueden ayudarnos a transitar las aguas hasta que el llamado “aislamiento social, preventivo y obligatorio” llegue a su fin.
Las nuevas tecnologías del siglo XXI hoy se perfilan como las grandes aliadas de una humanidad que lucha contra una pandemia inesperada y que se ve obligada a estar en cuarentena en cualquier parte del planeta, por primera vez en muchas décadas. Y de esa realidad no escapa la psicoloía, que se ve sorprendida ante la necesidad de cambiar su enfoque, olvidar las sillas y los divanes, y volcar la ayuda y el acompañamiento al otro a través de la pantalla de una computadora o un dispositivo móvil.
¿Qué puede provocar en una persona un encierro prolongado?
“El encierro, el miedo a la enfermedad, la invasión de los mensajes negativos en los medios de comunicación (la denominada “infodemia”), despierta en cada uno el miedo a la muerte, el miedo a la vulnerabilidad, el miedo a lo incontrolable”, sostuvo en diálogo con minutouno.com la licenciada Yolanda Weiss. “Esto va a repercutir en la personalidad que tenga cada uno. Hay gente que ante los estímulos hace como que no pasa nada, hay otros que se asustan mucho, hay otros que se le desencadenan situaciones emocionales a nivel físico”, agregó.
En ese sentido, el licenciado Andrés Sánchez Bodas, fundador de la carrera de Counseling en Argentina y director de Holos Sánchez Bodas y Berneman, sostuvo que, si bien “muchas personas lo están transitando bien, depende de las características de la personalidad de cada individuo. Aquellos que tienen bases depresivas la van a pasar peor, también aquellos con trastornos de ansiedad. Y destacó la presencia en esas personas de “crisis de angustia, llanto, trastornos de pánico, claustrofobias”.
Para Yolanda Weiss, la cuarentena es “una situación crítica en la que se pone en juego la resiliencia de cada uno para poder superar circunstancias con todo lo que viva en su mundo más cercano”. En este escenario, las consultas psicológicas online puede ser una gran herramienta.
En este punto de cuarentena, tampoco podemos olvidar que vivimos estos tiempos junto a otras personas. “En parejas que estaban en conflicto aumentan las discusiones y hay que ayudarlas. El miedo a la muerte es otra vivencia que empieza a escucharse, no tanto en los mayores, que lo tienen ‘mejor trabajado’, sino en los hijos o nietos en relación a sus padres y abuelos”, añadió Sánchez Bodas.
El crecimiento de las consultas psicológicas online en tiempos de coronavirus
Las consultas psicológicas online no son nada nuevo. Existen hace años. Pero en los últimos meses marcados por el coronavirus, desarrollaron un crecimiento exponencial. Incluso, muchos profesionales toman esta “oportuncrisis” para volcarse a esta modalidad, que les permite seguir en contacto con sus consultantes.
Daniel Bosch es uno de los pioneros en las consultas psicológicas online. En 2017 fundó en Alemania la plataforma Mentavio.com, que se dedica a unir a los consultantes con el mejor profesional para su problemática y combinar un encuentro virtual. Mentavio.com, que con el comienzo de la crisis por la pandemia de coronavirus experimentó un crecimiento exponencial, ya se encuentra disponible también en América Latina, incluida Argentina.
“Hasta este momento, veníamos teniendo una misma línea de crecimiento. Con el comienzo de la cuarentena, explotó una bomba. En tres días, Mentavio.com triplicó sus clientes”, resaltó Bosch.
Bosch destacó que las consultas psicológicas online tienen muchas ventajas. “Te ahorrás muchísimo tiempo, podés tener la sesión desde el lugar que prefieras y podés mantener el encuentro de una manera más cómoda”.
En ese sentido, Yolanda Weiss valoró la modalidad online de las consultas psicológicas: “Las consultas online sirven. Se pierde la corporalidad de la presencia en el encuentro pero se gana que el paciente sigue teniendo un sostén, sigue pudiendo ver su problemática, se sigue manteniendo el vínculo”.
También la modalidad online es valorada por Sánchez Bodas. Incluso en su institución educativa abrieron en el comienzo de la cuarentena un espacio de ayuda gratuita online en la que counselors ofrecen su escucha para quien lo necesite.
Sin embargo, Sánchez Bodas plantea la problemática de que muchas personas no se sienten cómodas con la modalidad online de las consultas: “Hay mucha preocupación en psicólogos y counselors que viven de su consultorio porque les disminuyó mucho la consulta, varios consultantes o pacientes han suspendido. Sólo siguen lo que están muy comprometidos con su proceso y los que están pasando malos momentos. Los que medianamente se pueden ‘rebuscar’ sin su proceso, abandonan hasta poder volver ‘en vivo’”.
El mayor crecimiento de las consultas psicológicas online puede verse en adolescentes y jóvenes, más familiarizados con las nuevas tecnologías. “Muchos venían pidiendo esa forma y varios colegas ya se han especializado en esta modalidad”, destacó Sánchez Bodas. “Para adultos cuesta mucho porque se tiene la sensación de que se pierde el contacto, lo cual es verdad”, agregó.
La cuarentena no implica dejar de hablar de la angustia cuando aparece
¿Cómo pasar de la mejor manera estos tiempos de cuarentena?
Nada es para siempre y, así como comenzó, la cuarentena también va a tener su final. Por eso es necesario vivirlo de la mejor manera. “Tenemos que salir de nuestro propio ‘Truman Show’ o zona de confort. Esto implica un trabajo de replanteo y, en eso, observar qué nos divierte, qué nos enriquece, qué habíamos dejado de lado y ver si podemos retomarlo, descubrir nuevas formas de estar con nosotros mismos y con el otro”, recomendó Sánchez Bodas, y nos regaló dos ejercicios para “sentirnos bien”:
- Sentarse a cenar virtualmente con amigos o parientes: el objetivo es coincidir todos juntos a la misma hora y realizar una videollamada de Skype, Zoom o WhatsApp para poder conversar y pasar el tiempo. Otra alternativa es imaginar que se está yendo a comer a algún lugar que todos conocen. “Para el cerebro, no existe diferencia entre lo real o imaginario, así que lo disfrutás”, afirmó Sánchez Bodas.
- Empezar a imaginar el próximo viaje después de la cuarentena: al planear un viaje ya lo estás viviendo, aunque falte un año.