«Confirmamos el fallecimiento del total de las diez personas (siete hombres y tres mujeres) halladas tras el naufragio del barco Kazu I», indicó a la agencia de noticias AFP un portavoz de los guardacostas, quien agregó que continúan con el operativo para dar con los desaparecidos.
El Kazu I partió su rumbo el sábado por la mañana con 26 pasajeros a bordo para navegar sobre el borde de un flanco en la península de Shiretoko, que es considerado Patrimonio de la Humanidad por su naturaleza prístina. Lo hicieron a pesar de que el pronóstico del tiempo advertía una jornada complicada.
«Era obvio que el estado del mar iba a empeorar y les dije que no salieran», relató el operador de otro barco turístico a la cadena de televisión NHK. «Pese a todo, salieron», lamentó.
El barco Kazu 1 envió una llamada de socorro a las 13.15 hora local (1.15 de la la Argentina) del sábado y advirtió que se estaba hundiendo, con una parte inclinada a 30 grados.
Aunque el aviso requería de una acción urgente, la Guardia costera llegó a las tres horas para socorrer. Actualmente, trabajan para encontrar a las 16 personas en conjunto con helicópteros policiales y militares y embarcaciones pesqueras locales.
En total eran 24 turistas, entre ellos dos niños, y dos tripulantes. Todos estaban protegidos con los chalecos salvavidas.
El «Kazu I» ya había tenido una avería durante una excursión en junio pasado al golpear los fondos cerca de su puerto base, según los medios japoneses.
El incidente no causó heridos, pero fue abierta una investigación por la policía sobre el capitán del barco por negligencia.