El personal del Instituto Municipal de Salud Animal (IMUSA) y de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana de Santa Fe recibió una denuncia telefónica por exhibición de animales en condiciones inadecuadas en la Basílica de Guadalupe, algo prohibido por ordenanza. Cuando llegaron al lugar, constataron que se trataba de muñecos.
«En la sede de la Basílica de Guadalupe, en calle Piedras, se está haciendo exhibición de animales, más precisamente yamas (sic), en condiciones inadecuadas, están sin agua y sin alimento, solicita intervención», expresaba la denuncia.
Guillermo Álvarez, subsecretario de Convivencia Ciudadana, relató en su cuenta de Twitter el curioso episodio. «Vaya sorpresa cuando llegamos al lugar. Pensamos que se habían congelado del frío los animales. Pero no. Eran animales de juguete para que los y las peques puedan sacarse una foto», contó.
Además, compartió imágenes de los presuntos animales explotados: una llama y un poni en versión muñecos, vestidos con elementos para que los niños pudieran sacarse fotos.
«Una linda anécdota de este hermoso fin de semana con esta gran fiesta santafesina», celebró el funcionario.
Álvarez cerró su relato con un mensaje sobre la evolución de estas conductas. «El personal de la Dirección de Control que tiene años trabajando en la Peregrinación nos contaba que años anteriores han sancionado y decomisado animales exhibidos para obtener un lucro. Nos alegra que hoy en Santa Fe estas cosas vayan cambiando», manifestó.
https://twitter.com/guillermojalvar/status/1520883545505288192