Con pancartas en las que se leía «Tiroteo diario es un problema diario», «Se puede sustituir a los senadores, pero no a los niños» o «Es hora de actuar», miles de manifestantes desfilaron este sábado por el centro de la capital, donde fue desplegado un importante dispositivo policial. Sobre el césped que rodea al mítico obelisco capitalino, decenas de miles de jarrones con flores blancas y naranjas fueron instalados en referencia a las 45.222 personas asesinadas con armas de fuego en el último año.
Cabe señalar que el 24 de mayo, un joven de 18 años mató con un rifle de asalto semiautomático a 19 niños y dos profesoras en una escuela primaria de Uvalde, en Texas, cerca de la frontera con México. Este tiroteo escolar que dejó la mayor cantidad de víctimas en casi una década, se produjo apenas diez días después de que un autoproclamado supremacista blanco de la misma edad matara a tiros a diez personas, principalmente afromericanos, en un supermercado de Buffalo, en Nueva York.
Estas últimas masacres, y los cientos de tiroteos que no aparecen en los titulares, renovaron los reclamos de mayores restricciones en un país donde estos ataques aumentaron más del 50% el año pasado, según el FBI.
En tanto, Biden reiteró su promesa de tomar medidas contra la violencia con armas de fuego que los sucesivos gobiernos fueron incapaces de frenar. Sin embargo, la posibilidad de sancionar leyes que limiten la cláusula constitucional que permite la libre portación de armas en Estados Unidos es casi nula por la composición de las cámaras del Congreso.
La Cámara de Representantes votó el miércoles a favor de prohibir la venta de rifles semiautomáticos y de cargadores de alta capacidad a menores de 21 años, entre otras cosas.
Pero la iniciativa tiene pocas posibilidades de ser refrendada por el Senado, donde la limitada mayoría oficialista es insuficiente para sacarla adelante y se enfrenta al bloqueo de la oposición republicana, que rechaza cualquier restricción contra los «derechos constitucionales de ciudadanos respetuosos de la ley».
Representantes de ambos partidos comenzaron a reunirse para intentar encontrar un texto de compromiso que pueda reunir la mayoría necesaria.