Según el informe, cada dólar exportado por Argentina contiene 11 centavos de insumos importados. Esto significa que los sectores que más exportan, como la industria química o la electrónica, son también los que más dependen de las importaciones: representan 27% y 43% de su valor bruto de producción, respectivamente.
El 8,5% de la producción argentina se vende a otros países, lo que se conoce como «propensión a exportar». Pero hay 12 sectores con un potencial exportador superior al promedio: los más importantes son la industria automotriz (38%), los servicios IT (24%) y la agroindustria (19%).
En estos sectores la proporción sube a 15 centavos de insumos importados por cada dólar que se exporta. Para duplicar sus ventas al exterior, estas industrias necesitan aumentar sus importaciones por un valor superior a los U$S 10.000 millones.
El estudio concluye que «en este marco resultan contraproducentes las restricciones al comercio exterior, como las limitaciones del acceso al mercado de cambios o las licencias no automáticas». «En el largo plazo perjudican en mayor medida a los sectores exportadores, lo que paradójicamente profundiza la escasez de divisas», cierra.